¿Existe un sentimiento de orfandad -al cumplirse treinta años de la muerte de Franco- en algunos sectores de la sociedad española? Es probable que muchos jóvenes desconozcan la figura de Franco, un militar que durante casi cuarenta años mantuvo en un puño a todos los españoles, impregnando sus vidas de represión y mediocridad. Partiendo de la agonía del Caudillo y llegando a la actualidad, Enrique González Duro somete a la sociedad civil a un examen clínico e histórico para detectar actitudes y sentimientos heredados que permanecen por debajo de las apariencias.
Rastreando la inquietante persistencia del autoritarismo en el comportamiento de los políticos y la sociedad española, como un detective de la historia, este libro persigue la huella del Generalísimo, desde una amena perspectiva psicológica y sociológica, encontrando restos dispersos pero significativos en el Rey, al que Franco educó y designó como sucesor, en Felipe González, quien creyó ser un nuevo caudillo de la izquierda, en José María Aznar, hijo y nieto de fervientes franquistas, en las declaraciones de la Conferencia Episcopal y en la actitud de algunos líderes y periodistas. Manejando una amplia documentación actual y de la época, este trabajo ofrece un fresco distinto de nuestro pasado reciente y pone de relieve cómo sobrevive una sociedad que ha vivido bajo una dictadura militar al tiempo que estudia cuáles son los vestigios que, con más claridad, conforman una parte de nuestra identidad nacional.
La sombra del general sigue siendo alargada en nuestros días.