En 2014 uno de los historietistas más celebrados de España iniciaba una sección en Babelia que tituló «Trampantojo». En sus propias palabras: «Engañar al ojo es, al fin y al cabo, lo que pretendemos todos los dibujantes». Han pasado ya seis años -y más de trescientas entregas semanales- en los que Max, recorriendo todos los registros del humor, se ha dedicado a demoler implacablemente el molesto velo de autosuficiencia y solemnidad que a menudo viste la cultura; seis años en los que no ha dejado de sorprendernos con su visión ácida sin ocultar, al mismo tiempo, un indiscutible amor por el arte y la cultura, de los que también se nutre. Es el momento ideal para revisitar y volver a disfrutar su trabajo, un reflejo siempre original, divertido y brillante de nuestra realidad.