El modo automático de las cámaras es fantástico para quienes empiezan a hacer fotos, porque se encarga de las complejidades de la apertura, la velocidad del obturador y el flash. Pero, aunque el automático ahorra complicaciones al principio, puesto que siempre hace unas fotos sin riesgos, más o menos correctas... y aburridas.
Cómo hacer fotos geniales de manera sencilla trata de esas fotografías cretivas, únicas y personales que aspiras a conseguir: fotos que muestran tu vida de una manera fabulosa. A diferencia de otros libros dirigidos a principiantes, esta obra no pretende explicar lo que hacen todos los botones y conmutadores de la cámara ni analizar científicamente lo que es un píxel, sino que se ciñe a las esencias de la fotografía par que puedas relajarte y disfrutar tomando buenas fotos desde el principio.